Sorvo es hoy, como hace 92 años, líder en confección de prendas para bebés.
Fundada en 1927, Sorvo ha sido desde entonces una marca de familia. Generaciones de madres y abuelos han confiado siempre en la calidad de su ropa para bebés, elaborada en forma personal y cuidada. Su prolongada experiencia en indumentaria para bebés le ha permitido actualizarse para satisfacer a sus clientes.
Horarios del Local Villa Urquiza
Nuestro local de Villa Urquiza permanece abierto en estos horarios.
Horarios del Local Belgrano
Nuestro local de Belgrano permanece abierto en estos horarios.
Desde 1927 haciendo
de las prendas para bebes, un producto de excelencia
Fundada por un artesano textil merecedor de importantes reconocimientos por su dominio de los tejidos de punto, conquistó con sus prendas a un mercado liderado únicamente por las mejores marcas del mundo.
La experiencia hace a la calidad
Casi un siglo de trabajo fecundo seriamente orientado hacia la búsqueda de las mejores materias primas, los modelos más prácticos y las técnicas de tejido más apropiadas aseguran la comodidad del usuario final – el bebe – y la confianza de la mamá.
Una verdadera vocación, que no se ha desviado del espíritu impreso por sus fundadores, y que las nuevas generaciones respetan y conservan y que, además de la aceptación entusiasta por parte del mercado nacional, nuestra calidad y seriedad lograron la estima de exigentes mercados internacionales.
Podemos asegurar a nuestros potenciales clientes que encontrarán en nuestra firma una empresa firmemente establecida y un proveedor confiable con muchas décadas de experiencia en ropa de bebé, que considera la calidad y el servicio al cliente su único modo de vida.
Uno de los logros de su fundador fue la invención (patentada) del otrora
conocido “pañal chiripá” que mereció la aceptación mundial hasta el
advenimiento de los pañales descartables. Aún entonces el pañal chiripá
SORVO continuó siendo reconocido en Alemania, donde los ecologistas lo
siguieron adoptando en su versión “natural”, es decir, algodón sin ningún
procedimiento químico.